Son de
palabras al vuelo que rompen
como las
olas sobre las rocas de mi seco cerebro
atormentando
a quien quiera maravillarse
de tan
milagroso acontecimiento
Cada
frase, cada omisión, cada silencio cada entonación
llenan
el vacío del alma que lo cubre
y lo
envuelve con el velo de la tristeza
haciéndolo
reír de ira acumulada
cuánto
soportará un corazón podrido
con una
granada de sensaciones funestas.
se
desgarrará con su propio miedo acumulado
y será
solo mugre en la acera de la conciencia
oh
palabras, cuanto las deseo y cuanto las odio
son el
placer de quien las sabe usar
y el
tormento de quien cree manejarlas
son el
cielo y el infierno, el día y la noche
el sol y
la luna, la vida y la muerte
son la
desdicha de quien se atrevió a mancillarlas