Subí por la más alta cadena de los pasos ajenos
viviendo un mar de emociones casi como una tormenta
y bajé de ellas, nade, me regocije y masturbé
soñe con el viento en mi rostro y la brisa bañandome
acariciandote y soltando el cuerpo que se ungía en el agua
caí en las más profundas aguas de la agonía una vez perdido
naufragando en la desolación del sentimiento perdido
vagué pasos y pasos, me ahogué y me pudrí solo
en la más profundas de las tinieblas llorando mi desdicha
una corriente me sacó de mi letargo dolorido
la piel se me reencarnó y volví con mi rostro enfurecido
mi puño alzado y el pensamiento si brumas ni tormentas
el mar ya era un pequeño lago al fondo de la tierra
yo en cambio era un hombre y una mujer, fortalecido
con la mirada fija en el objetivo
con la fe y la esperanza de que esta tierra cambiará
y no serán las manos mias quien la transforme
serán las manos de miles de hombres y mujeres
que día a día la labran desde su sombras al acecho
lo sé, lo sabemos, todos lo sabemos se están preparando
desde el ojo clandestino que todo lo ve y lo juzga
desde ese ojo perspicaz que con tamaño esfuerzo labrado
ha construido paso a paso esta esperanza cierta de que todo cambiará
mis manos están dispuestas a labrar
7 feb 2017
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario